Esta receta es una forma curiosa de preparar la gallina. Es una especie de pastel que reúne sabores como el del champiñón, la panceta, el huevo y el particular sabor que da la gallina todo encerrado en hojaldre. Solo su presentación ya la hace diferente y especial y es mucho más fácil de lo que parece su realización. El vino es aconsejable que sea seco y el caldo puede ser del que nos haya sobrado otro día.
INGREDIENTES:
- 200g de hojaldre.
- 1 puerro.
- ¼ de litro de vino blanco.
- 1 gallina.
- ¼ de litro de caldo.
- 10 lonchas de panceta.
- 3 huevos.
- 1 cebolla.
- 200 g. de champiñones.
- Sal.
- Aceite de oliva.
- Pimienta.
ELABORACIÓN:
1.- Poner en una cacerola el vino blanco y el puerro y ponerlo al fuego dejándolo cocer unos 15 minutos. Mientras tanto se limpia la gallina, se flamea y se corta a trozos.
2.-Salpimentarla generosamente y dorarla en una cacerola con aceite de oliva, con el fin de que quede sellada y luego esté más jugosa. Ahora añadir un poco de caldo de cocción del puerro y el caldo de pollo, dejando hacer durante 20 minutos.
3.- Una vez pasados los 20 minutos poner la gallina en una fuente de horno, agregarle las lonchas de panceta, dos huevos duros en trozos, perejil y cebolla muy picadita.
4.- Se completa con los champiñones limpios y cortados en láminas y con el caldo que nos queda del puerro. Preparar la masa de hojaldre amasándola y extendiéndola si la hemos hecho nosotros. Si la hemos comprado la abrimos y la extendemos.
5.- Una vez extendida la masa se cubre todo el contenido de la fuente de horno. Con los recortes reforzar los bordes, también se pueden hacer algunas figuras para decorarla. Pincelar con yema de huevo toda la superficie.
6.- Hacer unos pequeños orificios en la superficie antes de meterla en el horno. Meter en el horno unos 15 minutos previamente precalentado a 220º. Sacar tapar completamente con papel de aluminio y volverla a meter de nuevo ahora durante 30 minutos. Se saca y se sirve caliente.