La carne es un alimento básico, una fuente de proteínas y la imaginación es el único límite de cómo prepararla. Aquí tenemos una receta muy sencilla y versátil que no es nada del otro mundo ,pero nos permite tomar la carne con un sabor diferente y también adaptar la receta a cualquier tipo de carne: pollo, ternera, cerdo, etc.
INGREDIENTES:
- 4 filetes (de la carne elegida, solo cambia el tiempo necesario de cocción según el tipo).
- 200g de cebolla.
- 4 lonchas de panceta.
- Aceite de oliva.
- Harina.
- 3 zanahorias.
- Limón.
- Ajo.
- Laurel, perejil, Tomillo
- 4 pepinillos.
- Nata.
- Vinagre.
- Caldo.
- Sal y pimienta
ELABORACIÓN:
1.- Salpimentar los filetes y rebozarlos en harina. Freírlos con el aceite de oliva y conservarlos en caliente.
2.- En este aceite de la carne preparar un sofrito con la cebolla, el ajo y la mitad de las zanahorias, bien picadito todo.
3.- Cuando esté hecho el sofrito añadir una cucharada sopera de harina, removiendo continuamente.
4.- Poner dos vasos de caldo y dejar que se haga a fuego lento, sin dejar de mover. En este punto añadir la panceta, el laurel, el tomillo, y el perejil todo muy picado. Completar con la piel de limón rallada y un poquito de vinagre.
5.- Poner los filetes ahora y dejar que se hagan durante 10 o 15 minutos. Cortar a rodajas los pepinillos y las zanahorias restantes en juliana.
6.- Añadir los pepinillos y las zanahorias y también la nata y un chorrito de limón. Dejar hacer por unos 5 minutos más. Servir caliente.